9 minutos
El pilates es una disciplina popular que permite trabajar cuerpo y mente y reforzar la musculatura. Es un método sencillo con múltiples beneficios que te vamos a detallar en este artículo.
El pilates es un método de ejercicios que se centra en la fuerza muscular, la flexibilidad y la postura. Es una disciplina de fuerza donde el core o zona central de nuestro cuerpo se encuentra en mayor o menor medida en constante activación.
Incluye una serie de ejercicios con diferentes objetivos entre los que están reforzar la musculatura (tanto profunda como superficial), aumentar la fuerza y flexibilidad y mejorar la capacidad de concentración. Es una técnica de bajo impacto, está diseñada para mejorar la postura y la fuerza, además de la densidad muscular sin sobrecargar las articulaciones, por lo que los riesgos de lesiones son mínimos.
El pilates aúna diferentes disciplinas en una sola, desde el yoga a la gimnasia o la traumatología.
Comparte con el yoga aspectos como la mejora de la flexibilidad, el fortalecimiento del cuerpo o la importancia de la respiración.
Esta disciplina se basa en seis pilares fundamentales que son: concentración, control, centralización, precisión, fluidez y respiración.
¿Cómo practicar pilates?
Para poder practicarlo de manera correcta lo más importante es focalizar la atención en el cuerpo, la respiración y los movimientos y alinear cuerpo y mente. También es vital el control para evitar movimientos rápidos o incorrectos que puedan producirnos lesiones.
En pilates el centro centro o Powerhouse es de donde parte toda la fuerza para realizar los movimientos corporales. Se trata de una idea creada por esta práctica que se refiere a zonas en las que se concentra la energía necesaria para los movimientos corporales. Suelen estar en la parte inferior del tronco y por eso los ejercicios se focalizan en lumbares, caderas, nalgas o abdominales hacia el resto de extremidades.
En el pilates cada movimiento tiene una finalidad y es importante ejecutarlo bien para que cumpla esa finalidad. Si no se hace así los beneficios no se aprovechan y se pueden producir malas posturas que ocasionen lesiones, dolor o agujetas.
Los ejercicios de pilates deben tener lugar en un tiempo y una duración determinados que hay que respetar y emplear el tiempo necesario para que los ejercicios se desarrollen de forma adecuada. Lo ideal es realizar sesiones al menos dos o tres veces por semana, de entre 45 minutos y una hora cada una.
Es recomendable combinar el pilates con algún tipo de ejercicio aeróbico, como caminar, bailar, correr, nadar, ir en bicicleta, etc.
Debemos tener en cuenta la flexibilidad para que los músculos no sufran daños. A medida que practiquemos más pilates se harán más flexibles.
Otro elemento fundamental en pilates es la respiración. Aquí es básico estar concentrados para controlar el ritmo, el volumen y los momentos en que se respira. La respiración debe ir coordinada con cada movimiento para ayudar a controlar el equilibrio. Respirando de forma correcta aumenta la asimilación del oxígeno y la capacidad respiratoria, y la persona tiene más conciencia de su cuerpo y su mente.
¡Fórmate en Curso de Personal Trainer y Nutrición Deportiva!
Descarga gratis la guía formativaExisten también diferentes tipos de pilates:
Por un lado, está el pilates en suelo que es más sencillo y se puede practicar casi en cualquier lugar. Se usa una colchoneta o esterilla para los ejercicios y se pueden emplear también aros, balones, bandas elásticas etc.
Por otro lado, está el pilates con aparatos que emplea máquinas para esta disciplina ideadas por su inventor. Es más completo y nos aseguramos de que las actividades sean más correctas y seguras.
Entre esta máquinas están la cadillac, una cama con un gran arco metálico en su cabecera, en el cual se pueden colocar cinchas, poleas, y barras móviles que se anclan con muelles de distinta resistencia, la reformer, una plataforma rectangular y elevada, con un carro que se desliza por raíles y que ofrece resistencia al movimiento gracias a unos muelles de distintas intensidades, la silla con unos pedales sujetos mediante varios muelles de diferentes resistencias y el barril, un elemento con forma de semicírculo, y que se utiliza para realizar ejercicios de estiramiento de columna vertebral.
En cuanto al origen del pilates, su creador fue Joseph Hubertus Pilates, nacido en el año 1883 en Mönchengladbach, Alemania. Padecía problemas de salud y tenía musculatura débil. Investigó cómo poder fortalecer su mermado cuerpo mediante el ejercicio físico y el estudio de la anatomía humana. Observó movimientos que realizan los animales, las filosofías orientales y métodos de entrenamiento de antiguas civilizaciones como los griegos o los romanos.
En 1923 se trasladó a Estados Unidos donde, junto con su esposa, comenzó a enseñar el método Pilates que había ido desarrollando durante los años anteriores
El nombre de método Pilates en su inicio fue el de Contrología, ya que la idea base del método consiste en controlar los músculos.
El pilates es una práctica de bajo impacto que reúne una serie de beneficios importantes para el bienestar corporal y mental. De hecho, esta técnica se ha popularizado mucho y es habitual entre gente de todas las edades y condiciones. Te contamos cuáles son los beneficios más importantes del pilates.
Si deseas saber más sobre pilates de una manera profesional para poder convertirte en profesor de esta disciplina puedes empezar realizando un curso de personal training y nutrición deportiva.
En este curso vas a abordar una serie de disciplinas que te permitirá capacitarte con conocimientos teóricos y prácticos y ejercer como personal trainer. En el temario de cualquier curso para ser entrenador personal vas a tener que abordar contenidos relacionados con anatomía y fisiología humana donde verás temas como aparatos y sistemas del cuerpo humano, miología básica o bases del rendimiento de la persona.
Estudiarás también en el temario de personal trainer una parte dedicada a las capacidades físicas y al entrenamiento en sí. Aquí vas a analizar las capacidades básicas como fuerza, resistencia, velocidad y flexibilidad, las motrices como habilidad, agilidad y destrezas además de la coordinación, equilibrio, relajación, percepción espacial y temporal. En el temario debe haber también un espacio destacado para el entrenamiento, los principios y la estructura, así como el diseño de una sesión de fitness y de rutinas de entrenamiento.
Una vez finalices tu curso para convertirte en entrenador personal podrás trabajar en centros deportivos que ofrezcan esta opción o también abrir tu propio negocio para ofrecer tus servicios como entrenador personal.
Recuerda que puedes ser entrenador en asociaciones o agrupaciones, monitor de crossfit, entrenador personal para empresas (una opción en auge para ofrecer tus servicios acudiendo al lugar de trabajo para dar clases particulares o a grupos reducidos) o entrenador deportivo de un organismo o entidad pública (piscinas, gimnasios municipales). Las opciones laborales son múltiples.
Se trata de una profesión en auge por el creciente interés sobre los beneficios del deporte dirigido para mejorar la salud y para lograr mayor bienestar físico.
Ahora que ya sabes cuáles son los beneficios del pilates y todas las ventajas de esta disciplina solo te queda formarte con un centro especializado y a tu medida. Puedes contar con Campus Training para ello.