¿Es factible estudiar oposiciones a los 40 y conseguir un buen resultado en los exámenes? Sin lugar a dudas, la respuesta debe ser ¡por supuesto que sí! En este artículo te contamos cómo deberías afrontar este reto para lograr una plaza fija en la Administración Pública.
¿Por qué estudiar oposiciones a los 40?
Aunque cada persona tiene sus propias motivaciones, hoy en día es bastante frecuente estudiar oposiciones a los 40 años (e incluso más tarde) por razones como las siguientes:
- La precariedad laboral en el sector privado. Sin duda, este es uno de los motivos más frecuentes para decidirse a preparar unas oposiciones después de los 40. La estabilidad y tranquilidad que te proporciona un puesto de funcionario no tiene nada que ver con la que puedas encontrar en el sector privado. Por tanto, disponer de una plaza fija y con buenas condiciones laborales es una garantía de tranquilidad para esta etapa de madurez y, por supuesto, de cara a preparar una jubilación atractiva.
- Perseguir tu verdadera vocación. Aunque a menudo pensamos que los trabajos funcionariales se eligen por motivos que poco tienen que ver con la vocación, hay muchos ejemplos de lo contrario. Así, profesiones como las de maestro, juez, policía, bombero y muchas otras pueden ser realmente vocacionales.
- Horarios atractivos y conciliación de la vida laboral y familiar. Como sabes, muchos puestos de funcionario disfrutan de jornada continua (de 8 a 15 h, por ejemplo). En determinados casos, hay también la opción de elegir jornada de mañana o tarde y cada vez son más las administraciones que empiezan a implementar sistemas de teletrabajo o jornadas flexibles.
¿Qué desventajas tengo si quiero estudiar oposiciones a los 40 años?
Es muy habitual que, ante nuevos retos, enseguida nos planteemos posibles objeciones para no afrontarlos. En este sentido, algunas de las desventajas que puede tener estudiar oposiciones a los 40 serían las siguientes:
- No tener un hábito de estudio. Lo más probable es que, si tienes 40 años o más, hayas perdido en buena medida tus hábitos de estudio. De todos modos, con un poco de esfuerzo, podrás retomar la rutina sin mayor problema. A fin de cuentas, seguro que en tu época de estudiante también te costaba ponerte delante de los libros.
- Menor capacidad de memorización. Aunque es cierto que el cerebro puede ser más maleable y receptivo en nuestra juventud, cada vez conocemos más datos científicos que confirman nuestra capacidad para aprender durante toda la vida.
- Ocupaciones familiares y/o laborales. Quizás sea esta la mayor desventaja de estudiar oposiciones a los 40. Y es que, en mayor o menor medida, lo más probable es que a esta edad tengas más obligaciones y compromisos que cuando tenías 25 años. Por tanto, si tienes hijos o quieres compatibilizar tu trabajo con la preparación de oposiciones, te costará un poco más encontrar tiempo y ganas para estudiar.
¿Y ventajas?
Aunque se conozcan menos, también existen importantes ventajas de estudiar oposiciones a los 40:
- Madurez. Si tienes más de 40 años, seguramente tendrás muy claro qué es lo que quieres conseguir y serás plenamente consciente del esfuerzo que conlleva. Además, estarás sometido a menos distracciones y tus decisiones serán mucho más meditadas y realistas. Todo ello te ayudará a afrontar la oposición con mejor ánimo y más determinación.
- Mayor capacidad de concentración. Probablemente, en esta etapa de la vida te resultará más fácil concentrarte en una tarea concreta y llevarla a cabo sin distraerte. En cualquier caso, una buena herramienta para ello puede ser la técnica pomodoro.
- Experiencia, habilidades y conocimientos previos. Como es lógico, a lo largo de tu vida habrás acumulado una buena dosis de experiencia y conocimientos que pueden resultarte muy útiles durante la preparación de las oposiciones. Así, está demostrado que conectar los nuevos conocimientos con otros que ya dominamos es una de las mejores formas de memorizar.
- Cambio generacional. Aunque se haya dicho muchas veces, es cierto que hoy en día los 40 no son lo que eran en la época de tus padres o abuelos. Por tanto, lo normal es que en esta etapa mantengas todavía buena parte de la energía e ilusión de años anteriores o que incluso estés experimentando una segunda juventud. Además, a esto se une el alargamiento de la vida laboral (por el retraso de la edad de jubilación) y una mayor esperanza de vida. Por ello, cada vez es más normal encadenar dos o más profesiones totalmente distintas a lo largo de nuestra carrera.
Consejos para preparar oposiciones a los 40 años (y aprobarlas)
Algunas recomendaciones que podrían ayudarte a estudiar unas oposiciones a los 40 son las siguientes:
- Elige la oposición adecuada. Para ello, existen distintos aspectos que deberías tener en cuenta:
- Tu vocación. Sin duda, la vocación será tu mejor aliada para mantener la ilusión y motivación durante el proceso de estudio. Hay quien afirma que este aspecto puede suponer casi el 50% del éxito o fracaso de un opositor. Por tanto, elige algo que te guste y motive realmente.
- Tu experiencia y conocimientos previos. Este factor también es muy importante, ya que te ayudará a ser más rápido y eficiente en el estudio. Por ejemplo, si has desarrollado toda tu vida laboral en un despacho de abogados, seguro que te será más fácil preparar una oposición de la rama jurídica. De todos modos, siempre es posible reorientar totalmente tu carrera profesional.
- Tu titulación y demás requisitos de la oposición. Más que criterios de decisión, esto son auténticos condicionantes para presentarte a un proceso selectivo. Por tanto, asegúrate de revisarlos a conciencia y comprobar que los cumples a rajatabla. En este sentido, es una buena noticia que en determinadas oposiciones, como la de Policía, se haya flexibilizado el requisito de edad.
- Tu tiempo disponible y el nivel de dedicación deseado. Como es lógico, hay oposiciones más fáciles que otras. Elige la que mejor se adecue a tu disponibilidad y nivel de compromiso.
- Establece una rutina de estudio y respétala. Si reservas todos los días un determinado número de horas para estudiar la oposición, en poco tiempo verás cómo se consolida el hábito de estudio y te resultará más fácil concentrarte.
- Busca ayuda. Aunque sea posible preparar un proceso selectivo por libre, una buena academia de oposiciones puede hacerte mucho más fácil el trayecto. Ten en cuenta que vas a competir con muchos otros aspirantes, por lo que contar con un material de estudio de calidad y la ayuda de profesores con experiencia puede situarte en un magnífico punto de partida para conseguir tu plaza.
En resumen, estudiar oposiciones a los 40 no solo es posible sino que incluso tiene ciertas ventajas respecto de hacerlo a otras edades. La combinación de energía y experiencia que se da en esta etapa supone una excelente oportunidad para afrontar este reto. ¿No crees?