Perros en los hospitales: una terapia para los pacientes

Creemos que tu auténtica pasión son las mascotas, por eso estás aquí. Descubre más sobre la terapia con perros en los hospitales y los efectos beneficios sobre los pacientes.

La empatía de los perros anima a los enfermos en sus momentos más difíciles. Esto explica el auge de las terapias con perros en hospitales. Las intervenciones y proyectos con canes están a la orden del día.

Los pacientes y los profesionales se benefician de los efectos positivos de los peludos, que mejoran el ánimo y el beneficio de las personas, por esta razón es tan importante la compañía que aportan los animales. Para trabajar en este ámbito se necesita una formación especializada en una academia con garantías: ¡infórmate ahora sobre el Curso de Terapia Asistida con Animales!

¿Cuáles son los beneficios de la terapia con perros en hospitales?

La terapia asistida con animales en los hospitales está revolucionando el sistema socio sanitario. Los perros consiguen que los pacientes mejoren su estado de salud, confianza y autoestima.

Si quieres trabajar como asistente profesional de los servicios socio sanitario y aplicar estas técnicas necesitas estar al tanto de los beneficios de los animales para los pacientes ante distintos problemas.

En la siguiente lista vamos a ver la utilidad de las intervenciones asistidas con perros en los hospitales.

Relajación

En un entorno delicado y en situaciones extremas o difíciles los perros son un bálsamo de bienestar y relajación que permite sanar a los enfermos. Debemos tener en cuenta que la terapia no puede ser estresante para el perro, por lo que debemos limitar las visitas y el contacto con el animal.

Amor

Las mascotas pueden dar mucho amor, la naturaleza y los instintos de los perros son puros, no buscan nada a cambio y realizan una inmensa labor dando cariño a los enfermos en la terapia.

Bienestar 

Los proyectos con perros ayudan a los niños y adolescentes con problemas como trastornos en el neurodesarrollo. 

Motivación

Los perros son la motivación que necesitan los pacientes para seguir con el tratamiento, sobre todo en personas con problemas de movilidad, que al jugar con los canes realizan una actividad física sin tener que esforzarse. 

Estado de ánimo 

Los perros son muy alegres y transmiten esta energía a las personas enfermas. El afecto desinteresado de los peludos consigue sacar una sonrisa y momentos de felicidad a los pacientes en los momentos más duros.

Autoestima

Muchas personas tienen problemas de autoestima, que se ven agravados por los prejuicios o comentarios de las personas. Sin embargo, los animales no tienen prejuicios, ofreciendo compañía sin pedir nada a cambio o herir nuestros sentimientos. Los perros consiguen aumentar la confianza en sí mismos de los pacientes.

Estrés y ansiedad

Los pacientes a veces se ven sometidos a situaciones de estrés y ansiedad, pero los perros consiguen que se centren en disfrutar el momento, evadiéndoles de sus problemas. Los peludos pueden reconfortar las vidas de los enfermos.

Estimulación

Jugar con perros consigue estimular el cerebro, lo que favorece el bienestar mental y el desarrollo de los sentidos en los pacientes. Gracias a los juegos, las caricias, los mimos conseguimos estimular los sentidos y la mente de las personas.

Actividad Física

Los perros se mueven, y mucho, por lo que para jugar con ellos e interactuar los pacientes tienen que moverse, quieran o no. Siempre es más divertido y motivante jugar con un can que hacer una tabla de ejercicios, pero con estas intervenciones con perros podemos mejorar la movilidad y psicomotricidad del paciente.

Terapia con perros en hospitales: características

Aunque pueden participar otros animales, lo más habitual es que las terapias en hospitales se desarrollen con canes. Los principales factores son la inteligencia de los perros y que son animales muy sociales. 

Las personas tienen un estado de ánimo que los canes saben identificar con facilidad, detectando cómo se encuentra el paciente. Esto es posible gracias a la convivencia con los seres humanos. Si además el perro es la mascota habitual del paciente este sentido se encuentra más desarrollado porque ya han pasado una temporada juntos.

Otra de las características de la terapia con perros en los hospitales son los vínculos de afecto y confianza que se crean entre los animales y las personas. Esta comunicación entre perros y pacientes consigue que después de las sesiones los enfermos consigan comunicarse de forma más fluida con el personal del hospital y sus propios familiares.

Los cuidados de los perros terapéuticos en hospitales ofrecen ventajas a los pacientes

Aunque la lista de los beneficios que hemos visto con anterioridad ya era bastante amplia, los perros en los hospitales tienen muchas ventajas que también merecen ser reseñadas:

• Permiten realizar intervenciones con los niños porque los pequeños se encuentran más tranquilos a la hora de recibir una vacuna o colocarles vías.
• Disminuye la necesidad de medicamentos: los beneficios psicológicos se traducen en que las recuperaciones sean más rápidas. El trato con perros incluso mejora el ritmo cardiaco y mejora las constantes vitales.
• Motivación: para curarse hay que echarle ganas, y esto es más fácil si estamos acompañados de un peludo, que te entretiene y te apoya en los momentos más difíciles.
• Mejora la sociabilidad: los estímulos de perros consiguen mejorar las capacidades sociales y sensoriales de los pacientes porque se evaden de la realidad del hospital, lo que se traduce en una mejor comunicación entre los enfermos y sus familias.

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Las intervenciones con perros en los hospitales se realizan bajo la supervisión de personal especializado. Esta herramienta terapéutica mejora el estado de los pacientes hospitalizados.

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