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La puntualidad en el trabajo es algo que se da por hecho. Pero todos conocemos casos que incumplen la norma constantemente… Hoy te cuento qué ventajas tiene esta disciplina para las empresas, por qué te beneficia también a ti y cómo conseguir ser puntual durante el horario laboral. Si estás interesado en el campo de la gestión de personal, dominar este tipo de cuestiones te serán de gran ayuda. ¡No dudes en consultar nuestro Curso de Gestión y Dirección de Recursos Humano para formarte en este sector!
Son muchas las cosas que podemos decir sobre la puntualidad, pero comencemos por su propia definición. ¿Qué es la puntualidad en el trabajo? Esta es una pregunta fácil de responder. La RAE dice que es la «cualidad de puntual». Ser puntual es, lisa y llanamente, llegar a las citas a la hora fijada o antes. Es decir, no llegar tarde.
Lo más curioso de la puntualidad es que hoy día se considera casi como una habilidad o un talento inherentes a la persona, más que algo que se puede llegar a desarrollar. Todos estamos acostumbrados a oír frases como «es que yo no soy puntual», como si fuese algo innato (como ser rubio o no ser alérgico a los frutos secos).
En realidad, este tipo de actitudes no son más que excusas. La puntualidad en el trabajo se puede controlar fácilmente, salvo en ciertos casos en los que no podemos hacer nada frente a las circunstancias (un atasco, problemas en el transporte público…). Y la puntualidad en el trabajo aún más, ya que de ella puede depender nuestro medio de vida.
“Si piensas en llegar tarde porque crees que la otra persona llegará tarde, te estás dejando llevar por el comportamiento de los demás”, Autor desconocido
No te pierdas este fragmento de un programa de La 2, donde una psicóloga explica por qué llegamos tarde a los sitios y cómo podemos solucionar el problema:
La puntualidad en el trabajo es una de las cualidades más apreciadas por parte de las empresas. Es algo lógico, ya que el trabajador que siempre llega bien de tiempo a su puesto de trabajo demuestra una serie de virtudes:
Un trabajador puntual y comprometido es siempre valorado y respetado en las empresas. Y no solo por sus jefes: lo normal es que estas actitudes generen adhesión por parte de las plantillas. Otra cosa es el trabajador o trabajadora que llega tarde de forma sistemática.
Cuando se dan estos casos, el ambiente se enrarece por el lógico agravio comparativo que supone. Creo que todos conocemos ese tipo de situaciones (¿te suenan?), y la verdad es que no resulta nada agradable compartir el espacio de trabajo con personas que las generan de forma recurrente. En definitiva, saber qué es la puntualidad y aplicarla tanto en la vida personal como profesional nos ayudará en gran manera.
Las personas que son puntuales en el ámbito laboral también lo suelen ser en todos los ámbitos de su vida. Se trata de una cualidad muy interesante, que no solo es positiva para quienes nos rodean sino también para nosotros mismos.
Si eres puntual, siempre serás bien recibido. Quienes han quedado contigo se sienten respetados y apreciados; saben que te importa no hacerles esperar. Por otra parte, también te ayuda a sentirte bien contigo mismo y despierta el orgullo por las cosas bien hechas.
Por otra parte, quienes son impuntuales también tienen sus motivos (fundados o no) para serlos. Solemos pensar que es por falta de interés o porque no les importa que les esperen… Pero hay otras razones. De hecho, un estudio realizado en la Universidad Estatal de San Francisco descubrió que cerca de 20 % de los estadounidenses son impuntuales. Pero no porque no valoren el tiempo de los demás, sino por otros motivos…Qué es la puntualidad puede convertirse en todo un acertijo para muchos, pero te aseguramos que encontrar las claves te abrirá numerosas puertas laborales.
La puntualidad en el trabajo genera importantes beneficios a las empresas. No pasa nada por retrasarse unos minutos, por supuesto; más aún, si el trabajador cumple perfectamente su tarea y sus plazos, esos minutos no tienen relevancia alguna.
Pero llegar a la hora establecida (con un margen lógico) implica muchas ventajas. Una empresa en la que la plantilla es puntual muestra un ambiente muy profesional y da una buena imagen de la marca. También genera un clima satisfactorio entre los trabajadores.
Aparte, es mucho más fácil cumplir deadlines y estar al tanto de todo si respetamos nuestro horario laboral. Hay quien piensa que se puede compensar la impuntualidad quedándose a trabajar después de su horario… Pero esta práctica no es nada recomendable. Si los trabajadores hacen horas extras no remuneradas, la empresa estará cometiendo un delito.
Es un riesgo que no merece la pena correr frente a posibles inspecciones o a una denuncia. Por otra parte, a esas horas no es fácil contactar con otras empresas o trabajadores, lo que seguramente ralentizará el rendimiento. Y por supuesto, ¡cuesta mucho más trabajar cuando llevas ya unas cuantas horas en tu puesto!
La puntualidad en el trabajo no solo genera beneficios a las empresas, sino también a los empleados. Entre las ventajas que se desprenden de cumplir los horarios, podemos mencionar las siguientes:
Puedes observar así cómo saber qué es la puntualidad te ofrecerá un sinfín de mejoras en tu calidad de vida. Y es que se trata de una cualidad por la que, para los que no sea innata, deberían luchar más.
El problema con ser puntual es que nadie esta ahí para apreciarlo, excepto tú mismo, es decir, la persona más importante en tu vida.
Franklin P. Jones.
Si tienes una empresa, perteneces a un departamento de Recursos Humanos, diriges un equipo o puedes implementar medidas para mejorar el rendimiento del trabajo, es posible que la puntualidad de los trabajadores sea una de tus preocupaciones. Existen formas de fomentar la buena costumbre de llegar a tiempo y conseguir que todo el mundo salga ganando. Aquí tienes unas cuantas propuestas:
Evidentemente, esta medida no la podrás tomar tú en solitario (a no ser que seas el único propietario de la empresa). Pero establecer una franja amplia para poder llegar a trabajar y terminarla jornada (por ejemplo, 30 minutos) permite a todo el mundo contar con un margen al que ajustarse. Sobre todo es una fantástica medida para la conciliación familiar y laboral: muchos padres y madres tienen que llevar a sus hijos al colegio antes de ir al trabajo, y agradecen mucho este tipo de medidas.
Es más fácil que alguien haga algo si se le agradece y se valora lo que ha hecho bien, que si se le reprende y castiga cuando lo hace mal. ¿Te acuerdas de la famosa y televisiva Supernanny? El refuerzo positivo era algo que utilizaba constantemente, con resultados soprendentes. Si ves que la plantilla de tu empresa es puntual, reconócelo y prémialo. Hazles sentir que si el negocio va bien es en gran medida por sus esfuerzos y su compromiso. ¡La puntualidad es positivo para ellos y también para la empresa!
Es normal que, en algunos casos, los trabajadores tengan que hacer horas extras (lógicamente, remuneradas o compensadas) para cubrir los picos de trabajo. Si es vuestro caso, intenta que no sea algo habitual; y cuando suceda, procura que los trabajadores vean compensado su esfuerzo. Y por supuesto, no dejes de agradecérselo.
De nada sirve que exijas puntualidad en el trabajo si el jefe es el primero que llega tarde, se va antes de tiempo o directamente no aparece. Es mucho más fácil que los empleados de una empresa se sientan motivados para llegar puntuales a sus puestos, si ven que su superior directo o que el dueño del negocio son los primeros en estar allí.
¿Sabías que algunas grandes corporaciones (como por ejemplo Volkswagen) han implementado bonus para premiar a sus trabajadores más puntuales? Es una buena medida para fomentar la puntualidad. Si decides implantar esta práctica, asegúrate de que solo se aplica a los trabajadores que son puntuales de forma habitual y que no se extiende al resto por «costumbre», transcurrido un tiempo.
A día de hoy, la respuesta es «sí» por ley. Desde el 12 de mayo de 2019 todas las empresas están obligadas a guardar registro de las horas de entrada y salida de todos sus empleados, y a conservarlo durante cuatro años. Esta medida no solo están enfocada a mejorar la puntualidad en el trabajo (tu jefe se enterará sí o sí de la hora a la que has llegado); en realidad es un arma de doble filo. Porque si los trabajadores de una empresa hacen horas extras no remuneradas, también quedará registrado en los horarios…
Manejar equipos de personas no es fácil; por eso es importante tener una buena formación. Si te gusta el mundo empresarial, crees que puedes gestionar los problemas de los trabajadores con eficacia y dar un buen servicio a las compañías, una buena idea es que te formes en Gestión y Dirección de Recursos Humanos. ¿Qué te parece? Un campo donde podrás explotar al máximo tu sentido de la puntualidad.
Un buen curso te enseñará a resolver cualquier cuestión que se plantee: por parte de la dirección de la empresa, pero también de los trabajadores. La puntualidad en el trabajo es solo una pequeñísima parte de lo que gestionan y solucionan los profesionales de estos departamentos. También realizan labores de apoyo, formación interna, promoción, asesoramiento de los trabajadores…
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