7 minutos
El quiromasaje es una rama de los masajes manuales que aporta grandes beneficios al bienestar físico y mental. ¿Quieres saber más acerca de esta disciplina? ¡Te contamos cuáles son las principales técnicas de quiromasaje!
Antes de hablar de técnicas de quiromasaje, primero vamos a hacer una breve introducción acerca de qué es el quiromasaje. El término quiromasaje es un compuesto de masaje y la palabra griega quiros –que significa mano–, es decir, “masaje con las manos”.
En términos generales, el quiromasaje es descongestionante, reconstituyente y, sobre todo, muy relajante para el bienestar psicofísico.
El quiromasaje es terapéutico, ya que se trata de una práctica que busca aliviar dolores y bloqueos derivados de malos hábitos posturales, así como deshacer los “nudos” que se forman en la musculatura a causa del estrés.
¿Quieres saber un dato curioso sobre la historia del quiromasaje en España? Se trata de una práctica divulgada en nuestro país de la mano el Doctor Vicente Ferrándiz García (1893-1981), especialista en anatomía y fisiología.
Consiguió la aprobación oficial de esta disciplina en 1933, lo cual posibilitó la apertura de escuelas. Todo un logro, ¿verdad?
¡Fórmate en Curso de Técnico en Quiromasaje!
Descarga gratis la guía formativaBien, ahora que ya hemos hecho una pequeña introducción a esta disciplina masajística, vamos a seguir con las técnicas de quiromasaje que más se utilizan. ¡Toma nota!
Se trata de un tipo de maniobra totalmente descontracturante. Se utiliza para la eliminación de la tensión muscular mediante fuerzas de cizallamiento en la zona que se desee tratar.
Para las torsiones deben aplicarse simultáneamente ambas manos en un mismo movimiento. Es recomendable utilizar un medio que ayude a deslizarlas.
Este tipo de quiromasaje se sirve de la presión estática. A través de variaciones rítmicas de su intensidad se intentará producir pequeños movimientos de oscilación sobre la zona tratada.
El cometido es conseguir un efecto estimulante para la circulación a la vez que calmar el sistema nervioso. Si las vibraciones son rápidas, entonces estimulan. En cambio, si son lentas, se produce la calma.
Por otra parte, pueden ser superficiales o profundas: en el primer caso actúan sobre la piel y las terminaciones nerviosas; en el segundo sobre los órganos y las capas gruesas musculares.
Las sacudidas se derivan de las vibraciones. Esta técnica de quiromasaje es suavizante y relajante sobre los músculos, con enfoque manipulativo sobre las articulaciones.
Son muy buenas para ayudar al alivio de tensión en brazos y piernas, a la aceleración del sistema circulatorio el reestablecimiento del tono muscular.
Esta es una de las principales técnicas de masaje. Se aplica rozando o la mano sobre la piel del paciente sin llegar a producir deslizamiento de los tejidos que hay debajo.
Esta maniobra es una toma de contacto, una técnica para introducir el tratamiento que tendrá lugar en la sesión. Sirve para preparar la piel y producir en ella un calentamiento leve y superficial. También se puede aplicar el roce a nivel más profundo como técnica estimulante.
Con esta técnica de quiromasaje se movilizan los planos superficiales de piel sobre planos más profundos. Aquí, la mano y la piel conforman una unidad para buscar la presión controlada de los tejidos profundos de la zona tratada.
La fricción se puede realizar con diversas partes del cuerpo según la fuerza que se necesite aplicar:
En este tipo de quiromasaje se comprime y presiona la zona que se quiera tratar. La compresión puede ser estática o con deslizamiento. Se realiza abarcando una zona entre las manos o entre los dedos; o entre la mano y plano duro, que habitualmente suele ser óseo.
Es importante mantener el ritmo y la intensidad uniforme para obtener efectos homogéneos. El efecto de las compresiones es calmante, antiespasmódico y descongestionante.
Esta técnica tiene como base la compresión de la piel, tejido subcutáneo y músculos subyacentes. El amasamiento requiere aplicar una mayor fuerza e intensidad con las manos.
Consiste en coger, deslizar y levantar los tejidos musculares, intentando desplazarlos transversalmente de un lado a otro, realizando al mismo tiempo una presión y un estiramiento con ligera torsión del vientre muscular, por lo tanto es necesario el uso de medio deslizante.
Los amasamientos más utilizados son el digital y el palmodigital. Esta técnica favorece la circulación venosa y linfática de los músculos, acelerando así el intercambio tisular y favoreciendo la nutrición.
Una de las principales técnicas de quiromasaje es el clapping o cacheteo. Se utilizan las manos o partes de las manos para administrar golpes ligeros a un ritmo rápido sobre el cuerpo.
Las manos deben adoptar una forma cóncava con, por lo que escuchará un sonido hueco. Es una técnica estimulante que se utiliza para liberar secreciones bronquiales en caso de obstrucción.
Además del quiromasaje terapéutico, también hay técnicas que resultan muy efectivas para el quiromasaje deportivo, como por ejemplo los pellizcamientos. Esta maniobra consiste en realizar presiones de corta duración sobre la zona afectada. A menudo se utiliza junto a las sacudidas en masajes deportivos.
Por otra parte, otras técnicas de quiromasaje incluyen la práctica del shiatsu (masaje japonés), la reflexología (enfocada principalmente a pies manos y orejas) o el masaje sensitivo (utilizado sobre todo para aliviar el estrés, no para tratar lesiones).
Si te preguntas qué estudiar para ser quiromasajista, en Campus Training tenemos la respuesta: un completo curso de especialista en quiromasaje para prepararte a tu ritmo, desde donde quieras y cuando tú elijas.
Gracias al auge del sector del bienestar, el fitness y el deporte, los servicios de quiromasajista están cada vez más demandados.
Por eso, estudiando un curso de quiromasaje podrás introducirte en un sector con amplias expectativas de inserción laboral. Gracias a nuestro programa formativo, aprenderás a aplicar y dominar las técnicas del quiromasaje.
Al finalizar el curso, conocerás el funcionamiento de los órganos y los sistemas del cuerpo humano, aprenderás a aplicar la mejor técnica para conseguir los objetivos a través de distintas maniobras de masaje manual.
Además, una vez termines tu formación podrás complementarla para especializarte, por ejemplo, en quiromasaje deportivo, quiromasaje terapéutico, masajes para la relajación y el bienestar… ¡Tú eliges!
Ahora que ya conoces más a fondo las principales técnicas de quiromasaje, ¿te animas a formarte en esta apasionante profesión?
Con el curso de quiromasaje de Campus Training podrás prepararte para ejercer profesionalmente en lo que realmente te gusta y en un sector demandado.
Solicita más información gratuita y sin compromiso a través del formulario. ¡Tu futuro comienza hoy!