¿Te gustaría saber cómo estudiar Tramitación Procesal para conseguir una de las plazas en juego en la próxima convocatoria? En este artículo encontrarás las mejores técnicas y las recomendaciones más eficaces para lograr un buen resultado en la oposición. ¡Empezamos!
¿Cómo estudiar Tramitación Procesal? ¿Qué técnicas funcionan?
Si estás pensando en presentarte a las próximas oposiciones de Tramitación Procesal, antes de lanzarte a estudiar, es importante que tengas en cuenta algunos consejos, recomendaciones y técnicas que pueden ayudarte a superar los exámenes.
De este modo, cuando te planteas cómo estudiar Tramitación Procesal, hay una serie de pasos o etapas que debes tener muy en cuenta:
- Planificar previamente el proceso de estudio.
- Hacer una primera lectura de los materiales.
- Subrayar las ideas más importantes.
- Elaborar esquemas o resúmenes del contenido.
- Memorizar el tema.
- Repasar.
- Practicar con test o cuestionarios de autoevaluación.
En los siguientes apartados veremos en detalle cada una de estas cuestiones.
¡Organízate y vencerás!
Si haces una buena planificación del trabajo, partirás con una gran ventaja de cara a aprobar la oposición. De ahí que la clave de cómo estudiar Tramitación Procesal se encuentre muchas veces en comenzar con una organización adecuada y eficiente.
Para ello, procura tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Define tu horario de estudio. En la medida de lo posible, procura seguir un horario regular todos los días, trabajando en un lugar silencioso y sin interrupciones. De este modo te será más fácil mantener la constancia necesaria para superar la oposición de Tramitación Procesal.
- Planifica también tus descansos. Como sabes, es muy importante que hagas pausas frecuentes para despejarte y evitar que disminuya tu productividad. La Técnica Pomodoro puede ayudarte a organizar los descansos con regularidad.
- Márcate objetivos claramente definidos. Es decir, distribuye el temario en el tiempo disponible y proponte un número de temas a estudiar cada mes o semana. Esto te permitirá:
- Hacer un seguimiento preciso de tu progreso.
- Revisar tus objetivos periódicamente o ajustar tu método de trabajo si ves que no los alcanzas.
- Aumentar tu motivación, al proponerte un objetivo claro y perfectamente medible.
- Diseña un plan de repasos. Así, además del repaso general que puedas hacer en las semanas anteriores al examen, procura incorporar los repasos a tu rutina diaria desde el primer momento. Por ejemplo, cada vez que estudies cierto número de temas, trata de repasar los dos o tres anteriores.
¿Cómo estudiar tramitación Procesal? leer, subrayar y esquematizar
Una vez tengas tu plan de trabajo, el proceso de estudio propiamente dicho comienza con los tres pasos siguientes:
- Haz una primera lectura, atenta y reposada, del tema en cuestión. Se trata aquí de que comprendas perfectamente todos los conceptos y te hagas una idea general de la estructura del tema. Si hay algún término o explicación que no entiendes, consúltalos con los profesores o tutores de tu academia de Tramitación Procesal. No deberías pasar al punto siguiente si tienes dudas sin resolver.
- A continuación, subraya las ideas más importantes del tema. No se trata de abusar de los colores ni de marcar todo el contenido. En ese caso, dejaría de ser útil el subrayado. Por tanto, intenta ser conciso, pulcro y ordenado, manteniendo siempre un mismo código de colores.
- Por último, sería muy recomendable que elaborases algún tipo de esquemas o mapa mental para cada tema. De este modo, tendrás un resumen visual que te ayudará enormemente a aprender y repasar los contenidos.
Memorización y repaso
Si has seguido los pasos anteriores, el proceso de memorización propiamente dicho no debería resultarte muy difícil. En cualquier caso, lo más importante es que el tiempo que dediques a estudiar, lo hagas con la máxima concentración.
Son preferibles sesiones cortas pero al 100% de rendimiento que largas jornadas de estudio disperso.
Para comprobar si te sabes el tema, puedes hacer un simulacro, explicando el contenido en voz alta. Esta es la conocida (y muy eficaz) Técnica Feynman. En cualquier caso, recuerda seguir tu plan de repasos para asentar lo estudiado en la memoria a medio y largo plazo.
Cómo practicar después de estudiar Tramitación Procesal
En cualquier oposición de este tipo, una vez hayas estudiado el temario de Tramitación Procesal, es fundamental que practiques para el examen.
Por tanto, para conseguir un buen resultado en los test de Tramitación Procesal, te recomendamos lo siguiente:
- Incorpora poco a poco la práctica con test y simulacros de examen a tu rutina Lógicamente, las primeras semanas no tendrás los conocimientos suficientes para hacer un test, pero trata de empezar a practicar lo antes posible.
- En cualquier caso, procura reproducir lo mejor posible las mismas condiciones que te encontrarás el día de las pruebas. Por tanto:
- Cronometra el tiempo disponible, de acuerdo con lo que indiquen las bases del proceso selectivo de Tramitación Procesal.
- No consultes el temario ni otros materiales de estudio mientras realices los test.
- Corrige tus respuestas de acuerdo con el sistema de puntuación que indiquen las bases.
- Analiza tus fallos y, a continuación, repasa aquellos temas o contenidos que no domines adecuadamente.
- Si tienes acceso a exámenes de Tramitación Procesal de años anteriores, aprovéchalos. Además, saca partido a los test que pueda proporcionarte tu academia o a otros materiales de autoevaluación de los que puedas disponer.
Prepara con nosotros las oposiciones
En definitiva, la cuestión de cómo estudiar Tramitación Procesal puede resumirse en cuatro palabras: planificación, constancia, práctica y autoevaluación. Si sigues estos pasos, seguro que logras un buen resultado en el proceso selectivo. ¿Te animas a intentarlo?
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