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Las bodas de destino o destination weddings son un tipo de boda que están de moda. Cada vez más parejas optan por elegir enclaves únicos y diferentes para celebrar este día y convertirlo en toda una experiencia. Si te interesa saber más aquí te contamos qué es y cómo organizar una destination wedding.
Celebrar una boda es a día de hoy toda una experiencia que va más allá de la ceremonia y que involucra a invitados para disfrutar de un día especial en un lugar que deja huella. Por eso cada vez más son tendencia nupcial las llamadas bodas de destino o “destination wedding” en inglés.
Se trata de una boda donde la pareja decide casarse fuera de su lugar de residencia habitual. Así la ceremonia se convierte en una experiencia para los invitados y para los novios que viajan a un lugar especial para celebrar este evento único. Es un tipo de bodas que hemos visto en el cine con viajes a lugares exóticos o paradisíacos y que ha llegado para quedarse a nuestro país.
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Descarga gratis la guía formativaLas destination weddings se celebran por varios motivos. En ocasiones el principal es el lugar de origen de alguno de los miembros de la pareja que prefiere casarse en su ciudad. En caso de que la pareja no viva allí deberá organizar el evento en ese lugar natal y por tanto movilizar al resto de invitados para que lleguen desde las diferentes partes del país, o incluso del mundo, donde viven.
Otra opción es que la pareja elija un destino nacional o internacional que ame para celebarar esta unión y que congregue en este paraje a toda la familia y amigos que deberán desplazarse.
Destinos exóticos como el sudeste asiático, Colombia o México son cada vez más elegidos para celebraciones de este tipo.
Si te vas a casar y deseas organizar una destination wedding o si te dedicas al negocio de las bodas y te encargas de gestionar este tipo de eventos, has de tener en cuenta ciertos pasos o consejos necesarios antes y durante el proceso para que tu destination wedding salga perfecta. Te los contamos
Parece lógico que este sea el primer paso para organizar una boda de este tipo. La pareja debe investigar sobre el propio destino y organizar un viaje previo para visitar los enclaves donde se desea celebrar la boda siempre acompañada de un profesional o wedding planner que le asesore. Es importante también contar con un interlocutor en el lugar para tener contacto fluido y estar al día de cualquier novedad sin necesidad de desplazarse continuamente.
Es evidente que este tipo de bodas requieren un presupuesto mayor que las bodas convencionales. Este dependerá de la distancia a la que se encuentre el lugar de la boda y del nivel de vida del lugar donde se celebra. Debe fijarse un rango de precios para cada partida de la boda y contemplar también posibles imprevistos. En este presupuesto se incluye preboda, boda, postboda, alojamiento de los invitados y también alguna visita turística opcional para que los invitados puedan conocer los enclaves más emblemáticos del lugar o la gastronomía típica.
Si la boda se celebra en otro país es importante conocer los trámites burocráticos necesarios para poder llevara a cabo, desde licencias a permisos. Se puede hacer una ceremonia simbólica, después de haber hecho una formal y correctamente regulada en su lugar de origen o casarse formalmente en este destino. En este segundo caso es imprescindible contar con toda la documentación necesaria en regla y evitar imprevistos. Es importante también contratar a un traductor si no se domina el idioma del país donde se celebra la boda. Servirá además para facilitar la comunicación con los invitados.
La listas de invitados es un tema controvertido ya que una destination wedding implica cierto compromiso al tener que desplazarse lejos e invertir cierto presupuesto en ello. Las bodas de destino suelen tener lista de invitados más reducida con un aforo más íntimo. Deben ser avisados con tiempo suficiente para organizar su calendario. Los novios deberán decidir si asumen el coste de esos desplazamientos y los alojamientos que sus asistentes necesiten o si, al menos, les darán otro tipo de facilidades. El menú y la fiesta debe incluir guiños a la cultura local para que los invitados se sumerjan en ella. Lo habitual es pasar un mínimo de dos días en el lugar pero se pueden ampliar a más. No te olvides de planificar traslados con transporte para que llegar al lugar sea sencillo y accesible.
En este tipo de bodas es aconsejable trabajar con proveedores locales que conocen el funcionamiento del país y del sector y que cuenten con profesionalidad y experiencia. Es posible conseguir buenos precios si hay previsión temporal suficiente y conviene buscar referencias de esos proveedores antes de contratarlos.
En estos casos es vital la ayuda de un profesional y si es local puede ser una ventaja para coordinar la logística, contactar a proveedores locales, y asegurarse de que todo se ajuste a las expectativas de la pareja.
Entre las ventajas de una destination wedding está que la boda pueda ser una experiencia inolvidable para amigos y familia.
Es una ocasión para hacer un viaje y estar unos días de vacaciones además de conocer un nuevo país con una cultura propia y hacer actividades en los días previos y posteriores.
Una boda de destino también tiene algún inconveniente como que no todos los invitados podrán asistir debido a la distancia o los costos. La logística puede hacerse más complicada que en una boda local con muchos detalles que supervisar a distancia. El coste de la boda en general es mucho más alto.
Si deseas formarte para organizar destination weddings y conocer sus entresijos puedes hacerlo con un curso de organización y gestión de eventos y wedding planner.
Un curso de wedding planner ha de dotarte de conocimientos y capacidades para planificar y organizar bodas y otros eventos, diseñarlos de forma estratégica y en función de los objetivos, coordinar y gestionar equipos, negociar con proveedores, buscar patrocinios o promocionar actividades a través de diferentes canales.
A la hora de elegir un curso debes fijarte en que el curso que realices disponga de un temario amplio, accesible, útil y práctico para poder ejercer esta profesión cuando acabes tu formación.
La formación está dividida en 6 bloques temáticos, más un proyecto final con el que poner en práctica la teoría y organizar un evento desde cero.
La formación que te ofrece una escuela de este tipo está enfocada a personas que quieran formarse sobre gestión de protocolo y relaciones públicas o profesionales que ya trabajan en el sector de las relaciones públicas pero que desean obtener una preparación específica enfocada al diseño de celebraciones nupciales con el fin de ampliar su currículum o mejorar sus condiciones laborales en puestos de mayor nivel de especialización.
Entre las salidas profesionales que te ofrece un curso de wedding planner con un buen temario están, además de organización de bodas, dirección relaciones institucionales, event management, diseño de eventos, consultoría, departamentos de marketing, de publicidad y relaciones públicas y comunicación estratégica.
Ahora ya sabes qué es y cómo organizar una destination wedding. Si deseas un centro para formarte en este sector de forma especializada y a tu medida puedes contar con Campus Training.
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