Si no sabes cómo trabajar en los juzgados, pero te interesa este tipo de plazas, en este artículo te contamos todo lo que necesitas saber para conseguirlo.
Como verás, hay algunas oposiciones de Justicia bastante asequibles, que pueden ser la oportunidad perfecta para muchos perfiles.
¡Sigue leyendo si quieres conocer todos los detalles!
Cómo trabajar en los juzgados: plazas para todos los perfiles
Como ya sabrás, en los juzgados trabaja una gran variedad de profesionales, con distintos perfiles, titulaciones y cometidos.
Estos son algunos de los más importantes:
- Desde luego, los más conocidos son los Jueces y Fiscales, que tienen que superar unas duras oposiciones para lograr la plaza.
- En un segundo lugar, podemos citar a los Letrados de la Administración de Justicia (los antiguos Secretarios Judiciales). Deben tener también la titulación de Derecho y superar una oposición bastante difícil.
- Tenemos después los llamados Cuerpos Especiales de Justicia, que incluyen a profesionales como médicos forenses, técnicos de toxicología y laboratorio, etc.
- Finalmente, vamos a citar a los denominados Cuerpos Generales de Justicia. Sin duda, estas son unas de las plazas más interesantes y demandadas por la mayoría de personas interesadas en trabajar en los juzgados. Y es que se trata de oposiciones relativamente asequibles y con buenas condiciones laborales. En este grupo se incluyen tres tipos de plazas distintas:
Por ser las más interesantes, nos centraremos en estos tres cuerpos como una de las mejores formas de trabajar en el juzgado, para la mayoría de personas.
Requisitos para trabajar en los Juzgados en los Cuerpos Generales
Los principales requisitos para presentarse a estas oposiciones de los Cuerpos Generales de Justicia son los siguientes:
- Nacionalidad. Se exige tener la nacionalidad española. En consecuencia, este es uno de los tipos de plazas de empleado público que no admiten candidatos extranjeros.
- Edad. Deberás tener al menos 16 años de edad y, por supuesto, no haber alcanzado la edad de jubilación forzosa.
- Capacidad. Es requisito imprescindible poseer la capacidad funcional para el desempeño de las tareas del cuerpo al que te presentes. Por tanto, no podrás padecer una enfermedad ni estar afectado por alguna limitación física o psíquica que sean incompatibles con el desempeño de las correspondientes funciones.
- Habilitación. En este punto, se exigen las tres condiciones siguientes:
- No haber sido condenado por delito doloso a penas privativas de libertad, a menos que se hubiera obtenido la cancelación de antecedentes penales o la rehabilitación.
- No haber sido separado del servicio de alguna de las Administraciones Públicas, ni hallarse en inhabilitación absoluta o especial para empleos o cargos públicos por resolución especial, ni comprendidos en causa de incapacidad o incompatibilidad establecida en disposiciones legales.
- No pertenecer ya al cuerpo al que te presentas.
- Tasa. Por supuesto, deberás abonar la correspondiente tasa de examen, salvo que te encuentres en algún supuesto de exención.
- Titulación. Este es el requisito diferenciador entre los tres cuerpos:
- Auxilio Judicial: se requiere el título de Graduado en Educación Secundaria Obligatoria (ESO).
- Tramitación Procesal: necesitarás la titulación de Bachiller o equivalente.
- Gestión Procesal y Administrativa: título de Grado, Diplomado Universitario, Ingeniero Técnico, Arquitecto Técnico o equivalente.
Como ves, son requisitos bastante fáciles de cumplir, siempre que tengas la titulación académica adecuada para cada uno de estos Cuerpos.
¿Cómo son las oposiciones para trabajar en los juzgados?
Los procesos selectivos para trabajar en los juzgados se convocan con mucha regularidad, al menos en los tres Cuerpos Generales a los que nos estamos refiriendo.
Por tanto, tendrás bastantes oportunidades de presentarte, si es que no logras aprobar al primer intento.
En lo que se refiere a los exámenes de la oposición, son ligeramente distintos dependiendo del Cuerpo, como es lógico. Cuanto más nivel tiene la plaza, más difíciles serán las pruebas. De todos modos, las oposiciones de estos tres Cuerpos Generales de Justicia no son muy difíciles.
De forma muy resumida, estas son las pruebas que tendrás que superar en cada uno de ellos:
- Auxilio Judicial:
- Un test teórico de 100 preguntas (más 4 de reserva) sobre las materias del programa (26 temas). Cada pregunta tiene cuatro respuestas alternativas, de las cuales solo una será correcta.
- Un test de carácter práctico, compuesto por 40 preguntas, con 4 respuestas alternativas, de las cuales solo una será correcta. Las preguntas se referirán a dos casos prácticos de diligencia judicial que serán propuestos por el Tribunal.
- Tramitación Procesal:
- Un examen teórico tipo test con 100 preguntas (más 4 de reserva), cada una con cuatro respuestas alternativas, donde solo una de ellas será correcta. Versará sobre el contenido del programa (31 temas).
- Un examen de carácter práctico, integrado por 10 preguntas tipo test sobre un caso práctico que te propondrá el Tribunal.
- Un cuestionario tipo test de 20 preguntas, sobre la utilización del procesador de textos Microsoft Word.
- Gestión Procesal y Administrativa:
- Una prueba tipo test que constará de 100 preguntas, con cuatro posibles respuestas, de la que solo una es correcta. Versará sobre el contenido del temario (68 temas).
- Un cuestionario práctico tipo test, compuesto por 10 preguntas, con 4 respuestas alternativas, de las cuales solo una es la correcta. El ejercicio se referirá a un caso práctico propuesto por el Tribunal.
- Un examen escrito en el que deberás contestar a 5 preguntas de contenido procesal referidas a distintos temas del programa.
Como puedes ver, no son exámenes demasiado complicados, siempre que vayas bien preparado.
Unas oposiciones a tu alcance
Efectivamente, si empiezas a estudiar con tiempo suficiente, podrás conseguir el aprobado y llegar a trabajar en el juzgado en relativamente poco tiempo.
Pero, para ello, deberías:
- Planificar muy bien tu sistema de trabajo y organizar la jornada de estudio. No te olvides de planificar también los descansos necesarios.
- Conseguir materiales de calidad. Principalmente, procura tener un temario actualizado, muchos test y exámenes de práctica, legislación, etc.
- Contar con el apoyo de una buena academia de oposiciones de Justicia, que te ofrezca:
- Un método de preparación bien diseñado.
- Un equipo de profesores y tutores que te orienten y puedan resolver todas tus dudas.
- Materiales de estudio actualizados y de buena calidad.
En definitiva, ahora que ya sabes cómo trabajar en los juzgados, ¿qué tipo de puesto te parece más interesante?
Si empiezas a prepararte hoy mismo, con la ayuda de una academia especializada, podrás conseguir tu objetivo antes de lo que te imaginas.
¡Ánimo y suerte!