Estudiar administrador de fincas: cómo y dónde

Estudiar para ser administrador de fincas es una apuesta segura. Cada día hay más demanda de estos profesionales, y más aún si son competentes en su trabajo. Por eso, si estás valorando opciones para formarte y trabajar lo antes posible, no dejes de tener esta en cuenta.

En este artículo te contamos qué puedes estudiar, qué tipos de cursos hay, cuál es más adecuado para cada caso y en qué debes fijarte para escoger bien.

Trabajar como administrador de fincas: ¿quién puede hacerlo?

La figura del administrador de fincas es un clásico en las famosas juntas de vecinos. Según el Artículo 13.6 de la Ley de la Propiedad Horizontal, este cargo lo puede asumir cualquier propietario del inmueble. Pero lo más habitual hoy día es que los vecinos se «quiten el marrón» de la contabilidad, los presupuestos y los cobros contratando a profesionales.

Que, por supuesto, es la mejor solución. Curiosamente (y siempre según la LPH), si el administrador es un vecino no necesita tener una formación específica para ostentar el cargo. Pero si se contrata a un profesional, la cosa cambia: la misma ley indica que debe tener una titulación específica: solo lo pueden ejercer «personas físicas con cualificación profesional suficiente y legalmente reconocida para ejercer dichas funciones».

La verdad es que la información es bastante confusa. La ley exige «cualificación profesional suficiente», pero en realidad no existe ninguna obligación en lo que respecta a qué estudiar para ser administrador de fincas.  Sí la hay para colegiarse (aunque lo cierto es que el listado de titulaciones universitarias que permiten hacerlo es enorme; prácticamente cualquier licenciado puede hacerlo), pero no para trabajar.

Esto, por supuesto, no significa que no debas tener una formación. De hecho, sería raro que una comunidad de propietarios contrate a alguien que no pueda demostrar formación y experiencia en temas de contabilidad, fiscalidad, mediación, contrataciones… Y menos aún, una empresa que se dedique a proveer de estos servicios a distintas comunidades.

No es una profesión fácil y relajada, pero si tienes las cualidades para ejercerla la disfrutarás, seguro. Para saber más sobre cuáles son las funciones de un administrador de fincas y cómo ejercer bien su trabajo, no te pierdas este vídeo del profesional colegiado Miguel Fernández. Mejor explicado, imposible.

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Cuáles son las funciones de un administrador

¿Qué puedo estudiar para ejercer como administrador? La respuesta puede ser muy amplia o muy concreta. En resumen, lo que debes tener en cuenta es que tu formación te debe dotar de amplios conocimientos en contabilidad, legislación, herramientas para mediar, obras y reformas, servicios de mantenimiento y contratos, entre muchas otras cosas.

La mejor manera de saber qué formación deben tener estos profesionales es recurrir de nuevo a nuestra amiga, la LPH. La legislación vigente indica que un administración de fincas debe cumplir obligatoriamente una serie de obligaciones. Para no perdernos con el lenguaje burocrático, vamos a resumirlas:

• Velar por el buen estado de los servicios de la finca, y hacer las advertencias que sean necesarias para que esto sea así.
• Realizar un presupuesto anual de gastos basándose en el del año anterior, más el IPC.
• Contratar las reparaciones que sean necesarias para la finca. Si son emergencias, las puede contratar primero y comunicárselo después al presidente, o bien hacer la comunicación previa presentando varios presupuestos.
• Ejecutar los acuerdos que se alcancen en las juntas de vecinos, realizando cobros y pagos.
• Custodiar la documentación y tenerla siempre a disposición de los propietarios.
• Otras funciones acordadas con la junta de propietarios, incluidas en su contrato.

Cualquier formación que no incluya dominar estas funciones con solturas, no te servirá para conseguir un trabajo bueno y estable. Además, un buen administrador de fincas no debe tener miedo a trabajar (meterás horas, dalo por seguro) y tiene que tener capacidad para las relaciones con los demás.

La «mano izquierda» es algo que nunca les debe faltar a estos profesionales. Y por supuesto, la integridad y la honradez.

Qué estudiar para ser administrador de fincas

Ahora sí, vamos con la cuestión que nos ocupa. ¿Cuál es la formación perfecta para llegar a ser el mejor administrador de fincas ever? No es fácil responder a esta pregunta, pero lo que sí es importante es que cubra las funciones esenciales. Si lo que te interesa es realizar un grado superior universitario, debes saber que existen carreras específicas para trabajar en este sector.

Por ejemplo, puedes cursar el Grado Superior en Administración de Fincas que se imparte en algunas universidades públicas (entre ellas, la Universidad de Alcalá de Henares en la Comunidad de Madrid) y en distintos centros privados. Y si has terminado un grado superior relacionado con este ámbito, también puedes optar por un Máster en Administración de Fincas y Gestión Inmobiliaria.

Los grados superiores y másteres no son tus únicas opciones. ¿No quieres pasar cinco años estudiando? ¿Te interesa trabajar lo antes posible? Entonces, no lo dudes: lo que necesitas es un curso especializado. Estos cursos no imponen requisitos previos a los estudiantes, se centran en lo fundamental desde el primer día y tienen una duración más breve (aunque la formación suele ser intensiva).

Una buena alternativa puede ser realizar un curso de gestión administrativa a distancia. Aprenderás todo lo que necesita dominar un buen administrador, y además podrás estudiar desde cualquier lugar.

Olvídate de tener que desplazarte, perdiendo tiempo y dinero: este tipo de formación incluye clases telepresenciales en directo, en las que podrás aprender, preguntar e interactuar con profesores y alumnos sin moverte de tu casa.

Estudiar para administrador de fincas: fórmate hoy, ¡y trabaja mañana!

Si te decides por hacer un curso de este estilo, mi consejo es que te asegures de que incluye prácticas en empresas del sector. Los buenos profesionales son muy buscados, y si demuestras tu valía es posible que tus jefes te contraten una vez finalizado el periodo de prácticas.

Y aunque no fuera así, habrás conseguido introducirte en el mundillo y aprenderás sobre el terreno. ¡Ah! Y podrás rellenar ese campo de tu CV que permanecía vacío: el de la experiencia.

Si rellenas el formulario que encontrarás en esta web, estarás mucho más cerca de convertirte en todo un profesional. Recibirás toda la información que necesitas sobre los aspectos que comentábamos (clases, profesores, duración, prácticas…), sin compromiso por tu parte. Y podrás tomar una decisión crucial para tu vida. ¿A qué estás esperando?