¿En qué consiste el área de investigación y desarrollo?

¿Sabes a qué se dedica el área de investigación y desarrollo dentro de una empresa? Desde luego, en las últimas décadas, el término investigación y desarrollo ha sonado hasta la saciedad y se ha revelado como una de las parcelas fundamentales que debe cuidar toda empresa que se precie.

Por ello, muchas organizaciones, desde pymes a grandes corporaciones, han decidido invertir en esta área, para mejorar la calidad de sus productos o servicios y conseguir sobresalir sobre sus competidores.

En realidad, es una actividad que repercute en toda la empresa y que puede presentar diferentes objetivos dependiendo de la perspectiva con la que se aborde.

A lo largo de este artículo descubrirás cuáles son las funciones de un departamento de investigación y desarrollo, de qué se ocupa exactamente, para qué sirve y por qué las empresas depositan tanta inversión y esperanza en esta área.

¿Empezamos?

¿Qué es el área de investigación y desarrollo?

Como es obvio, el área de investigación y desarrollo (I+D) es la que se ocupa de llevar a cabo estas dos actividades dentro de cualquier empresa u organización.

En esencia, se encarga de la búsqueda de conocimiento original y desconocido hasta la fecha, vinculado sobre todo con la ciencia y la tecnología, que tiene como finalidad el desarrollo u optimización de una solución para un problema determinado.

De todos modos, no siempre tiene por qué vincularse la I+D con el área científica, ya que también pueden mejorarse procesos administrativos o de gestión, por ejemplo.

En este sentido, formarse a través de cursos de Administración también podría permitir incorporarse a determinados departamentos de investigación y desarrollo.

De unos años a esta parte, se ha agregado a estos dos términos la innovación, dando lugar a la famosa expresión I+D+i. En esencia, este último término se relaciona con la creación de nuevos productos, más competitivos y rentables. 

En este sentido, la innovación y el cambio tecnológico son fundamentales no solo en el ámbito empresarial, sino también para el desarrollo de la sociedad en su conjunto. Por tanto, no se debe ver este concepto como un gasto, sino como una inversión de futuro. 

Veamos en qué consisten exactamente estos tres componentes del término I+D+i:

1. Investigación

En esencia, la investigación hace referencia al proceso por el cual distintos profesionales trabajan para descubrir nuevos conocimientos que se puedan utilizar para crear y proponer soluciones novedosas.

2. Desarrollo

Partiendo de técnicas ya conocidas, el área de desarrollo trabaja para mejorar o crear soluciones a determinados problemas.

De este modo, los conocimientos obtenidos en la investigación se utilizan como base para el desarrollo.

3. Innovación

La innovación es un proceso muy creativo, relacionado con la ciencia y la tecnología. En este caso, el conocimiento se emplea para desarrollar soluciones rentables desde el punto de vista económico, y eficaces desde el punto de vista técnico.

En esencia, la mayoría de tecnologías que hoy disfrutamos han nacido gracias a estos tres procesos, que también representan para las compañías un gran potencial de beneficios.

Esto es lo que convierte al departamento de investigación y desarrollo en algo esencial para muchas empresas. 

¿Cómo funciona el área de investigación y desarrollo de una empresa?

Como ya hemos apuntado antes, el área de investigación y desarrollo es la que se encarga de poner en marcha procesos encaminados a integrar conocimiento técnico y científico que permita obtener nuevos productos, servicios, materiales o procesos que mejoren ciertos aspectos de la empresa. 

Por tanto, abarca todo el proceso que va desde la investigación, el descubrimiento o la invención hecha en el laboratorio hasta la posterior producción en fábrica. 

El objetivo principal es el avance tecnológico y la innovación, sin perder de vista el incremento de la eficiencia y la generación de beneficios económicos.

De este modo, la investigación continua funciona como una fábrica de ideas que llevan al lanzamiento de productos novedosos o de tecnologías internas que suponen adelantos, mejoras, simplificación de procesos, etc. 

Por estos motivos, el área de I+D contribuye de forma destacada al crecimiento de las empresas y a su expansión. 

Funciones del departamento de investigación y desarrollo

Se puede decir que la función principal de un departamento de I+D+i es la búsqueda de productos y servicios que mejoren aspectos sustanciales de la empresa, con la vista puesta en un aumento de las ventas y en el logro de ventajas competitivas.

Obviamente, tampoco se pierde de vista el objetivo más general de promoción de la actividad científica dentro de la empresa.

En cualquier caso, veamos algunas de las funciones específicas del área de investigación y desarrollo:

• El estudio de las necesidades de investigación, la planificación y propuesta de estudios.
• La gestión de acuerdos con otras empresas dedicadas a la investigación y desarrollo.
• La dirección de actividades en lo que se refiere a becas orientadas a la investigación. 
• El control de los recursos para la financiación de las investigaciones.
• Vigilar la actualidad tecnológica del sector, es decir, qué hace la competencia. 
• El desarrollo de tecnologías específicas.
• La protección de las innovaciones por medio de patentes. 

Ventajas de contar con un área de investigación y desarrollo en una empresa

Invertir en I+D+i puede suponer para las empresas importantes beneficios, de entre los que destacan los siguientes:

• Obtención de conocimientos exclusivos de tecnología que pueden servir para desarrollar productos o servicios innovadores que aporten crecimiento para la empresa. De este modo, se producen sinergias entre conocimiento y producción. 
• Desarrollo de talento y capacidad en el seno de la empresa y, en particular, en el departamento de innovación y desarrollo.
• Al estar en la vanguardia tecnológica, la compañía puede producir no solo mejores productos, sino ofrecer un mayor valor para el usuario.
• Incremento de la productividad. A través de un proyecto de I+D+i, la empresa puede llegar a ofrecer mayor calidad en sus servicios y productos, al tiempo que reduce costes.
• La creación de soluciones de vanguardia puede significar una mayor expansión e influencia internacional, que abre nuevos mercados y redunda en el prestigio de la organización.   
• Mejora la reputación de la marca. La inversión en esta área genera expectativas a largo plazo y suele generar una mayor confianza en los usuarios y clientes.
• Creación de puestos de trabajo. Para organizar el área de investigación y desarrollo se necesitan perfiles muy especializados que puedan estimular la innovación. 
• Mayor independencia tecnológica de la empresa.
• Posibilidad de explotación comercial de las innovaciones.  
• Posibles ventajas fiscales por inversión en I+D+i. 

Inconvenientes de la inversión en I+D

En cuanto a los eventuales inconvenientes de invertir en el área de investigación y desarrollo, básicamente son los dos siguientes:

• Se trata de una importante inversión de recursos económicos, humanos y de tiempo.
• Los resultados no pueden esperarse a corto plazo. De hecho, muchos procesos de I+D pueden llevar a callejones sin salida o a resultados inaplicables en la práctica. 

El área de investigación y desarrollo, fuerte apuesta de futuro para la empresa

Desde luego, hay empresas que temen a lo desconocido y desaprovechan las oportunidades que traen los cambios, que pueden ser muy ventajosos. 

De acuerdo con la teoría económica, la innovación es el origen del beneficio, logrando que los productos resulten más atractivos para los clientes. 

Por tanto, las empresas que invierten en el área de investigación y desarrollo están en disposición de ofrecer productos de vanguardia que la competencia no puede desarrollar al carecer del conocimiento necesario. 

Por este motivo, la inversión de las empresas en esta área se hace imprescindible para garantizar y mejorar su competitividad (o incluso su supervivencia futura).

De este modo, la inversión económica en un departamento de investigación y desarrollo supone apostar e invertir en el futuro de la compañía para proseguir con su crecimiento, evolución y expansión.

Ahora que ya sabes a qué se dedica el área de investigación y desarrollo y qué beneficios puede aportar a las empresas y a la sociedad en general, ¿te parece que está valorada en su justa medida?

Sin duda, a menudo se pasa por alto su papel y no recibe la inversión y atenciones que merecería.

¿No crees?