¿Qué es una reforma agraria?

Si no sabes qué es una reforma agraria exactamente y qué implicaciones tiene a nivel práctico, en este artículo encontrarás respuesta a todas tus dudas.

Y es que, a lo largo de la historia, se han producido numerosas reformas de este tipo en muchos países de todo el mundo. Es decir, reestructuraciones que han provocado cambios sustanciales relacionados con la tierra laborable en el contexto del campo y el medio rural.

¡Sigue leyendo para conocer todos los detalles!

Qué es una reforma agraria: definición

Como señalábamos al principio, ha habido tantas reformas agrarias, cada una con sus peculiaridades, que cuesta hacer una definición general.

En cualquier caso, podemos quedarnos con esta sencilla definición:

Se entiende por reforma agraria una batería de medidas que buscan reorganizar y modernizar la estructura productiva del trabajo agrícola, con el fin de mejorar las técnicas de cultivo y aumentar la producción.

Dichas medidas pueden ser de carácter económico, social, político y legal. Así, entre ellas, podemos encontrar:

• La expropiación de terrenos por parte del Estado, para la implantación de diferentes iniciativas de explotación.
• La transferencia de propiedades del terrateniente al agricultor.
• Las regulaciones compensatorias por las cuales el propietario latifundista, al desprenderse de sus tierras, recibe una contraprestación. 
• Las cesiones gratuitas a los nuevos usuarios, que conllevan una compensación por parte de la sociedad a los antiguos propietarios. 
• La limitación de la cantidad de terrenos que pueden estar bajo una misma propiedad, para prevenir la formación de latifundios.
• El trato de favor al campesinado con la incorporación de servicios públicos, alfabetización, maquinaria para incrementar la producción, así como la implantación o mejora de internet y nuevas tecnologías.

Por tanto, aunque estas transformaciones afectan principalmente a las cosechas y cultivos de plantas, la recolección de frutos, la cría de ganado, etc., también pueden tener otras implicaciones más allá de lo estrictamente agrícola.

Desde cuándo ha habido reformas agrarias y cómo han evolucionado

En el mundo antiguo ya hubo fenómenos que podríamos identificar con el concepto de reforma agraria, relacionados con la propiedad de la tierra y su explotación, que trajeron periodos convulsos y cambios legislativos. 

No obstante, es con la llegada de las revoluciones burguesas en el siglo XVIII, como la Revolución Francesa, cuando surgen los primeros ejemplos de reforma agraria propiamente dicha.

Así, a la vez que se superaban los modelos feudales, el incremento de la natalidad requería reformas del sistema agrícola para cubrir la demanda alimentaria.

Ya entonces hubo movimientos campesinos que consiguieron redistribuir las tierras para su explotación y beneficio.

De este modo, el concepto de reforma agraria tal y como hoy lo conocemos cristaliza en el siglo XIX, relacionado con la lucha de sectores revolucionarios en clara oposición con las concentraciones latifundistas.

En el siglo XX, las reformas agrícolas fueron características del bloque socialista formado por países como la Unión Soviética y China.

No obstante, también se produjeron diferentes transformaciones agrarias en el mundo capitalista destinadas a mejorar la calidad de vida del campesinado y a aumentar el nivel de producción. Así ocurrió, en mayor o menor medida, en Europa, Estados Unidos y América Latina.

¿Cuáles son los objetivos de una reforma agraria?

Puede decirse que el gran objetivo de toda reforma agraria es evitar que las grandes concentraciones de tierra cultivable pertenezcan a unos cuantos latifundistas. 

Por extensión, también se trata de conseguir que las tierras estén dedicadas a su explotación productiva y no a la especulación, que lleva al enriquecimiento de unos pocos terratenientes. 

De hecho, encontramos esta dicotomía en la motivación de las diferentes reformas: unas ponen más el acento en la productividad; las otras sobre la tenencia o propiedad de las tierras. 

No obstante, para los gobiernos pueden existir objetivos distintos a la hora de llevarlas a cabo. Por ejemplo:

• Un régimen comunista puede perseguir la colectivización de tierras productivas.
• Desde el mundo capitalista, la reforma puede ser una oportunidad para modernizar el sector y maximizar la producción agrícola para cubrir las necesidades de su mercado interno.

A pesar de ello, se puede decir, a grandes rasgos, que toda reforma agraria persigue la diversificación de la propiedad de la tierra para activar zonas desaprovechadas e incrementar la producción valiéndose de las nuevas tecnologías.

Así pues, existen reformas impulsadas por los gobiernos y otras que han venido forzadas por la lucha de la clase baja campesina. Por lo general, estas últimas han perseguido que el pequeño y mediano agricultor pueda ser propietario de la tierra que trabaja.

En definitiva, se trata de una aspiración casi tan antigua como el ser humano: el reparto de la riqueza, en este caso de la que surge de la tierra y el trabajo de las manos del ser humano. 

De todo ello se derivaría una mayor igualdad social que acabaría con unas condiciones laborales explotadoras de la clase campesina.

7 ejemplos paradigmáticos de reforma agraria

Entre otras muchas reformas agrarias, podemos destacar las siguientes:

• Desamortización de Mendizábal en España (1836), que expropió las tierras al clero y la nobleza.
• Reforma agraria de la revolución mexicana (1915), que prohibió los latifundios.
• Ley fundamental de socialización de la tierra (1918) de Lenin en la Unión Soviética, que abolía la propiedad privada de la tierra. 
• Colectivización agraria de Stalin en la Unión Soviética, hacia finales de los años 20 y primeros 30, con la concentración de la tierra y mano de obra en granjas de explotación colectiva. 
• Reforma de la emancipación de las tierras agrícolas en Japón (1947), que significó la compra de grandes extensiones de tierra a terratenientes y su venta a los agricultores a precios muy bajos. 
• Reforma agraria en la revolución cubana de Fidel Castro, iniciada en 1958, con la confiscación de grandes propiedades y la fijación de límites para la propiedad. 
• Reforma de la propiedad de la tierra en Chile, en tiempos de Salvador Allende (1970 -1973), que expropió más de 6 millones de hectáreas de terreno. 

Ahora ya sabes, exactamente, qué es una reforma agraria y cuáles son sus objetivos, seguro que puedes entender mucho mejor la trascendencia que han tenido a lo largo de la historia

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